No tenía previsto escribir hoy sobre el 112 aniversario del cinematógrafo en España, pero gracias a Un jubilado me he animado a hacerlo. También mi amigo Agustín Raluy se hace eco de ello. El caso es que se ha hecho coincidir la celebración con la festividad de San Isidro en Madrid. Al parecer, según Rakel Melero, fue dos días antes, el 13 de mayo. Pero lo que realmente me ha llevado a comentar esta historia es lo que viene después, ya que nos afecta más directamente y lo considero más interesante. Según comenta Un jubilado, en la Wikipedia consta como fecha de rodaje de Salida de misa de doce del Pilar de Zaragoza 1896 (aquí y aquí también), convirtiéndose así en la primera película rodada por españoles. Salida de misa… no se rodó en 1896. Durante mucho tiempo se pensó que así era y aún hoy se sigue arrastranso ese error, tal como se puede ver en la Wikipedia. Hace ya unos años que Agustín Sánchez Vidal documentó, en el primer volumen de El siglo de la luz. Aproximaciones a una cartelera (1996), que la filmación tuvo lugar en 1899. Lo que la hace extraordinaria es que se trata de la primera película conservada del cine español hasta la fecha. Sin embargo no se trata de la primera, pues existe documentación que habla de otros rodajes anteriores, realizados por españoles, que desgraciadamente no han llegado a nuestros días. Este error también aparece reflejado en la web Aragón de Cine. Por supuesto puede haber intereses creados. Que la fecha más temprana de un rodaje hecho por españoles coincida con una película que se conserva puede servir para muchos propósitos. Sin embargo ha de prevalecer la rigurosidad y no las excusas baratas para dar legitimidad a reivindicaciones absurdas sobre qué Comunidad filmó antes o si nuestro país fue más pionero que otro.
En cualquier caso, recapitulando lo dicho anteriormente, la primera película conservada del cine español y rodada por un español es Salida de misa de doce del Pilar de Zaragoza. Una breve filmación de los Jimeno, padre e hijo, en 1899, que constituye un documento de primer orden. Si a España el aparato de los Lumière llegó mediante los operadores enviados por la fábrica de Lyon, entre los que destaca Alexandre Promio, y el primer sistema de concesiones, en Zaragoza concretamente sería de otra manera, ya que hubo que esperar a que se pusieran en venta los aparatos. Tal como han señalado numerosos historiadores, los primeros empresarios españoles que se dedicaron al cine procedían del negocio del espectáculo o del mundo de la fotografía. Ambas facetas se dan en nuestra ciudad, con los Jimeno para el primer caso e Ignacio Coyne en el segundo.
Cuando algún operador de los Lumière, Promio u otro, mostró el cinematógrafo en las fiestas de San Isidro de Madrid en 1896, había dos zaragozanos dedicados a la exhibición de figuras de cera que inmediatamente se interesaron por el invento. Eran Eduardo Jimeno Peromarta (Zaragoza, 1846-Madrid, 1914) y su hijo Eduardo Jimeno Correas (Zaragoza, 1870-Madrid, 1947). Pronto marcharon a Francia para conseguir un aparato pero fueron timados con una máquina que no era la de los Lumière y por la que además pagaron una cantidad desorbitada. Desilusionado y tras una discusión con su hijo, nuevamente Jimeno padre viajó a Francia, esta vez a la propia fábrica Lumière en Lyon donde por fin adquirió el verdadero aparato, con unas cuantas películas para proyectar y por mucho menos dinero. Enseguida pasaron a filmar ellos mismos las películas que más tarde exhibirían. Tras algún intento fallido rodaron la ya emblemática Salida…, que supuso un éxito en su pase zaragozano. Este triunfo, les llevó a rodar otra salida con la gente sabedora de lo que iba a suceder, con lo que, al ir desfilando, las personas iban saludando a la cámara y así se bautizó con el nombre de Saludos.
Los Jimeno no pretendieron en ningún momento lanzarse a una aventura productora más seria, por cuanto ante todo eran hombres de negocios dedicados a exhibir películas y a estas tareas se dedicaron con más profusión a medida que crecía el fenómeno.
En este enlace a la entrada de Eduardo Jimeno Correas en la Gran Enciclopedia Aragonesa, sí que se hace referencia a este entuerto.
En cualquier caso, recapitulando lo dicho anteriormente, la primera película conservada del cine español y rodada por un español es Salida de misa de doce del Pilar de Zaragoza. Una breve filmación de los Jimeno, padre e hijo, en 1899, que constituye un documento de primer orden. Si a España el aparato de los Lumière llegó mediante los operadores enviados por la fábrica de Lyon, entre los que destaca Alexandre Promio, y el primer sistema de concesiones, en Zaragoza concretamente sería de otra manera, ya que hubo que esperar a que se pusieran en venta los aparatos. Tal como han señalado numerosos historiadores, los primeros empresarios españoles que se dedicaron al cine procedían del negocio del espectáculo o del mundo de la fotografía. Ambas facetas se dan en nuestra ciudad, con los Jimeno para el primer caso e Ignacio Coyne en el segundo.
Cuando algún operador de los Lumière, Promio u otro, mostró el cinematógrafo en las fiestas de San Isidro de Madrid en 1896, había dos zaragozanos dedicados a la exhibición de figuras de cera que inmediatamente se interesaron por el invento. Eran Eduardo Jimeno Peromarta (Zaragoza, 1846-Madrid, 1914) y su hijo Eduardo Jimeno Correas (Zaragoza, 1870-Madrid, 1947). Pronto marcharon a Francia para conseguir un aparato pero fueron timados con una máquina que no era la de los Lumière y por la que además pagaron una cantidad desorbitada. Desilusionado y tras una discusión con su hijo, nuevamente Jimeno padre viajó a Francia, esta vez a la propia fábrica Lumière en Lyon donde por fin adquirió el verdadero aparato, con unas cuantas películas para proyectar y por mucho menos dinero. Enseguida pasaron a filmar ellos mismos las películas que más tarde exhibirían. Tras algún intento fallido rodaron la ya emblemática Salida…, que supuso un éxito en su pase zaragozano. Este triunfo, les llevó a rodar otra salida con la gente sabedora de lo que iba a suceder, con lo que, al ir desfilando, las personas iban saludando a la cámara y así se bautizó con el nombre de Saludos.
Los Jimeno no pretendieron en ningún momento lanzarse a una aventura productora más seria, por cuanto ante todo eran hombres de negocios dedicados a exhibir películas y a estas tareas se dedicaron con más profusión a medida que crecía el fenómeno.
En este enlace a la entrada de Eduardo Jimeno Correas en la Gran Enciclopedia Aragonesa, sí que se hace referencia a este entuerto.
3 comentarios:
El artículo muy bien documentado, aunque ayer al hacerme la corrección me fui enterando de todo.
Traté de buscar esas, creo que 65 imágenes de la "Salida..." pero no encontré nada.
Saludos
Hola Toni,
leo tu blog habitualmente pero creo que nunca te he dejado ningún comentario, así que aprovecho el aniversario de la primera proyección para:
1. saludarte
2. felicitarte por el blog
3. animarte para que sigas escribiendo y así, nosotros lo podamos seguir leyecdo.
4. mandarte un beso virtual. MUA!
Hola, gracias por vuestros comentarios.
Emilio, que yo sepa en internet no se puede encontrar nada. Igualico que en Francia, donde en la página del Instituto Lumière (www.institut-lumiere.org) puedes acceder, entre otras muchas cosas, al famoso programa Lumière del 28 de diciembre de 1895: www.institut-lumiere.org/francais/patrimoinelumiere/premiereseance. En fin, cuanto tenemos que aprender todavía de los vecinos.
Iguazel, me alegra encontarte por aquí. Espero que te vaya todo muy bien. Y no me felicites tanto que me sacas los colores. Eso sí, espero seguir escribiendo durante muuuucho tiempo.
Besos y abrazos
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